Carmen Acebo
Tijuana, 28 de agosto de 2022.- Raymundo Atanacio Luna, diputado del Partido del Trabajo, propuso que sea la Federación quien regule la contaminación visual ocasionada por la publicidad exterior que perjudique al equilibrio ecológico y el ambiente.
En la reforma propuesta, se sugiere también corresponda a las entidades federativas la prevención y control de este tipo de contaminación, y a los municipios la aplicación de las disposiciones jurídicas relativas a la prevención, vigilancia y control de la contaminación visual.
La propuesta, turnada Comisión de Medio Ambiente y Recursos Naturales, define a la contaminación visual como todo aquello que afecte o perturbe la visualización de algún sitio o paisaje, afectando su estética.
La Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT), podría suscribir convenios o acuerdos de coordinación, a fin de que los gobiernos de las entidades federativas, prevengan y controlen la contaminación visual originada por la publicidad exterior y la de papel, perjudicial para el equilibrio ecológico y el ambiente.
Publicidad exterior, una actividad que va en aumento
Señala que la publicidad exterior en México está causando problemas de contaminación visual que es un elemento dañino para las personas, de acuerdo al estudio Contaminación Ambiental Visual y Publicidad, además de causar la distorsión del ambiente urbano.
Esta ha ido incrementando anualmente entre 10 a 15 por ciento, aunque a la fecha no hay un registro con el número exacto de este tipo de publicidad, que es aquella que utiliza lugares públicos para desarrollarse y va dirigida a un público determinado.
La publicidad exterior, está formada por carteles, vallas publicitarias, rótulos luminosos, banderolas, mobiliario urbano y todos aquellos soportes que se instalan en lugares públicos o donde se desarrollan espectáculos, eventos culturales y encuentros deportivos.
Además, la fabricación de papel representa una enorme fuente de contaminación y tiene un gran impacto medioambiental, es uno de las mayores contaminantes del agua y del aire, y de las que más gases efecto invernadero emite, alrededor de 3,3 kg de CO2 equivalente por cada kilo de papel.
Dentro de la publicidad exterior más común son espectaculares en edificios o azoteas, muros publicitarios, letreros luminosos, bardas pintadas, dípticos y trípticos.
Diversos estudios han comprobado que este fenómeno afecta la concentración y percepción visual de la población, aumentando el estrés, especialmente entre los conductores, lo que puede dar lugar a accidentes de tránsito.