TEMPORADA DE PATOS
Por: Ricardo Falcó
Mientras la campaña electoral toca a su fin, la desbandada política local apunta el desastre que será para algunos grupos políticos los resultados previstos para el próximo 1 de julio. Especialmente dentro del Frente PAN, PRD y Movimiento Ciudadano en Baja California, los números no les dan, pues mientras Ricardo Anaya sencillamente no levantó, la dupla de candidatos a Senadores, Gina Cruz y Jorge Ramos, ya se limitan a luchar por alcanzar un resultado que les deje al menos la tercera senaduría del estado. Dicho escenario ha llevado a algunos candidatos a diputados del Frente a de plano abrirse de capa e intentar salvar sus distritos.
Escándalo entre los panistas causó la estrategia que David Saúl Guakil, ex priista coordinador de la campaña de Peña Nieto en 2012 y aspirante a alcalde convertido al movimiento naranja, comenzó a operar en el octavo distrito, a la vez que su equipo de campaña ya promueve abiertamente el voto para el y solo el: voten por AMLO Presidente y Bonilla, o Arregui, Senador; pero voten por Guakil Diputado, es el llamado.
La traición a sus aliados panistas, especialmente contra Jorge Ramos, ha dolido en la estructura partidista. Entre sus grupos es conocido que Guakil recientemente se acercó a Jaime Bonilla, candidato bandera de Morena en BC, para hacerle una propuesta indecorosa: voto cruzado, es decir, sumar los votos de ambos en franca puñalada a los compañeros candidatos de uno y otro.
Pero ni los votos que pudiera sumarle Guakil a Bonilla ni su capital económico fueron tentación para el empresario de medios de comunicación, quien a estas alturas ya no pelea por ganar la Senaduría, sino para mantener el amplio margen entre sus contrincantes. Ni lo necesita ni lo quiere, pues.
A pie tierra, la confusión entre las operadoras panistas del octavo distrito se regó como pólvora ante la traición de Guakil. Sin arraigo entre los blanquiazules, pues no olvidan su larga trayectoria en el PRI y ahora emanado de Movimiento Ciudadano, el candidato ha tenido que formar su propia estructura electoral a base de billetazos; sin embargo, el arrastre de AMLO a sus candidatos prevé una jornada con una participación mucho mayor de la habitual, por lo que para enfrentarla con las típicas tácticas de compra de votos y movilización, el capital que tendría que invertir es enorme.
Mientras el PAN aprieta filas para salvar los distrito 04 y 05, el octavo no será prioridad para ellos, cuanto más que en la recta final el candidato de la alianza intentó apuñalar al hijo consentido del partido, Jorge Ramos. Habrá que ver si el próximo domingo el PAN tolerará la traición del expriista y supuesto aliado.