Tijuana, BC, a 12 de octubre del 2022.- Acceder a una cirugía relacionada con alguna afección cardiaca en bebés e infantes puede ser tardado y costoso para los padres de familia, luego que este tipo de intervenciones estén catalogadas como de alta especialidad médica, según refirió el doctor Adrián Sánchez Flores, cardiólogo en pediatría y parte del equipo médico de la Fundación Bebé Cardio.
“En la Secretaría de Salud del Estado no hay programa público, se hace diagnóstico, pero no hay manera de tratarlo. Yo laboró en el servicio de pediatría y los casos los tienes que mandar hacía la Ciudad de México a que lo atiendan en hospital de tercer nivel”, apuntó el médico.
“Eso implica comprar boletos avión, gastos, tener que ir a cinco o diez consultas para que le hagan diagnóstico, un expediente clínico y formarlo a la fila con todos los pacientes de todos los Estados”, añadió.
Lo anterior genera que hospitales de tercer nivel ubicados en Guadalajara o la capital del país, se saturen de casos, teniendo en espera a cientos de pacientes que tienen que aguardar por su turno, tiempo que en algunos casos empeora la condición de salud de los menores de edad.
“Hay un rezago impresionante porque hay pocos programas hablando de instituciones públicas. No la encuentras en todo el país, prácticamente seguimos siendo un país bastante centralizado en cuestiones de salud pública”, consideró el miembro de la Fundación Bebé Cardio.
Para aquellos padres y madres de familia que buscan fuera del sector público, el dinero a gastar requiere de sumas importantes.
“Si buscas la atención privada yo creo que el menor costo es de 150 mil pesos hacía arriba, estas hablando que una cirugía a corazón abierto te puede costar medio millón de pesos, entonces si nos preguntamos quién tiene ese dinero a la mano, la gran mayoría no lo tiene”, refirió Sánchez Flores.
No obstante, todas las dificultades de espera o económicas, esta población infantil que sufre de alguna afección en el corazón tiene grandes posibilidades de salvarse de ser atendidos, siendo que el 90% de los casos pueden tener solución, según el cardiólogo pediatra.
Por eso motivo se estará realizando en el Club Campestre el III Torneo de Golf de Exalumnos de Instituto México, esto en beneficio de la Fundación de Bebé Cardio, la cual tiene a 22 niños y niñas esperando ser intervenidos del corazón.
Cristal Jiménez, directora de la fundación, dijo que en el mundo uno de cada cien padece alguna enfermedad cardiaca, por lo cual resaltó la importancia del torneo benéfico.
En este se busca recaudar un millón y medio de pesos para operar a diez menores de edad con padecimientos del corazón.
Será el 21 de octubre a las 07:00 horas cuando dé inicio el torneo, en el cual participarán 152 exalumnos del Instituto México.
