Tijuana, 16 de mayo de 2022.- 4.5 millones de mexicanos entre 1942 y 1964 trabajaron en los Estados Unidos para ayudar con la mano de obra durante la Segunda Guerra Mundial mediante el programa bracero, hoy, 80 años después del inicio del programa, los Braceros y sus familias siguen exigiendo el dinero que el gobierno mexicano les debe.
En agosto de 1942 Estados Unidos y México firmaron el Acuerdo de Labor Agrícola Mexicana, para que trabajadores mexicanos cruzarán a los Estados Unidos a trabajar en los campos, principalmente en el estado de California, aunque después de la guerra, en un intento de mantener el crecimiento económico mediante la mano de obra barata, el programa se extendió a otros estados y otros trabajos.
58 años después del programa bracero, los trabajadores que quedan o las familias que les sobreviven exigen la compensación que el gobierno mexicano debió haberles dado en cuanto regresarán al finalizar el programa.
Para la época, sus salarios eran menos de un dólar la hora y de ese dinero sus patrones debían depositar el 10% a un banco mexicano, el dinero nunca llegó a los bolsillos de los trabajadores cuándo regresaron a México.
Ventura Gutiérrez Méndez, quién inició BRACEROPROA hace 24 años, sigue reclamando el pago que se le debe a los braceros, así como sus familias, aunque ese no fue el origen de su lucha “el tema no era el 10% de los fondos de los exbraceros, ellos querían saber si tenían un beneficio bajo el fondo del seguro social americano, pero resultó el inicio de este movimiento que reunió a 100 mil ex braceros en su mayoría, hijos, hijas, viudas”.
Tras años de lucha y la toma del rancho perteneciente al entonces presidente Vicente Fox Quezada, el gobierno mexicano creó el fideicomiso “Fondo de pago a los exbraceros” aunque este solo estaba diseñado para entregar “un apoyo social, no el 10% que verdaderamente se les debe” enfatiza Gutiérrez Méndez.
Gloria, hija de un bracero y quién, a sus 86 años aún sigue reclamando el pago, recuerda que su padre trabajó en el programa bracero desde 1942 hasta su muerte “ya no recuerdo cuando fue, yo estaba muy chiquita”.
Sin embargo al crecer y enterarse de que no se le había entregado a su madre el dinero que le correspondía por el trabajo que su marido había realizado en Estados Unidos, viajo desde Ciudad de México, su lugar de nacimiento, hasta Tijuana para pelear por lo de su familia hace más de 20 años.
Gloria empezó a vivir en Tijuana y a seguir la lucha de otros familiares de ex braceros, hasta estos días. Su madre falleció en 2003 pero ella sigue buscando que el gobierno federal le entregué los frutos del trabajo de su padre.
Fox Quezada y su sucesor, Felipe Calderón entregaron el recurso a algunos braceros, pero dejaron a varios colgados.
Un aproximado de 200 mil braceros recibieron un pago único de 38 mil pesos durante esas dos administraciones. Desde entonces el dinero está parado, Enrique Peña Nieto en todo su sexenio no destino “un solo peso” a la causa de los braceros.
Aun esperan que la administración de Andrés Manuel López Obrador les cumpla, a pesar que fue durante estos últimos 3 años no se ha destinado dinero para los pagos y el congreso federal se deshizo del Fideicomiso en el 2020, con el dinero que estaba etiquetado para eso quedando en manos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público. Desde entonces no han sabido más al respecto.
