Tijuana.- Desde el inicio de la pandemia por COVID-19, las autoridades sanitarias han informado que las medidas de prevención -lavado de manos frecuente, uso de cubre-bocas, distanciamiento social y aplicación de gel antibacterial- deben aplicarse y reforzarse en todos los grupos de la población, toda vez que la enfermedad puede presentarse en infantes, adolescentes y adultos.
Lo anterior lo reafirmó el jefe de Pediatría del Hospital General de Tijuana (HGT) Oscar Armenta Llanes, quien dio a conocer que, de marzo de 2020 a enero de 2021, se han hospitalizado a 91 niñas, niños y adolescentes por sospecha de COVID-19, de los cuales 18 resultaron positivos a través de la prueba PCR.
Indicó que, aunque es menos frecuente que los menores de edad desarrollen complicaciones graves por COVID-19 -como neumonía, gastroenteritis severa, invaginación intestinal y Síndrome Inflamatorio Multisistémico- no los exenta de presentarlas o incluso de perder la vida por esta causa.
“Es importante la participación de los padres de familia, tutores y docentes, para que informen y supervisen a los menores de edad en el seguimiento adecuado de las recomendaciones de prevención, recordando que, hasta el momento, es la única forma de evitar la enfermedad en este grupo de edad”, mencionó el especialista.
Armenta Llanes, mencionó que, alrededor del 40% de los pacientes pediátricos hospitalizados presentaban comorbilidades como cáncer, desnutrición o problemas de desarrollo psicomotor, lo que implicaba una mayor susceptibilidad de la enfermedad y sus manifestaciones graves.
Recomendó evitar la automedicación y mantener el aislamiento en el hogar en caso de haber estado expuesto a una persona positiva a COVID-19: “En caso de presentar algún síntoma respiratorio, gastrointestinal o neurológico grave, deberán trasladar al menor a la Clínica de Fiebre o al Filtro Respiratorio Externo del Hospital General de Tijuana, con las medidas preventivas necesarias”, expresó.
Por último, Armenta Llanes agregó que los menores con COVID-19 también representan un riesgo de contagio para sus familiares cercanos y/o contactos directos, de ahí la importancia de cumplir con disciplina las medidas preventivas ya mencionadas para evitar el incremento de casos activos en la comunidad.