Monterrey.-La mañana del sábado 26 de octubre ha sido muy relevante para México respecto a la atención de la pandemia de COVID-19, pues el país recibió un par de cargamentos de la vacuna desarrollada por Pfizer y BioNTech. Con ellos, ya son tres lotes los que pisan territorio nacional y el último llegó a Monterrey.
A través de su cuenta de Twitter, el titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), Marcelo Ebrard, dio a conocer que el “el tercer cargamento llegó a Monterrey a las 09:15 horas. Con ello, la vacunación iniciará en el norte de la República conforme a lo previsto en el Plan en curso a cargo de la Secretaría de Salud”.
Martha Delgado, subsecretaria de Asuntos Multilaterales de la SRE, también destacó que en el proceso de vacunación participará la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena). A Monterrey, según lo dicho por las autoridades, llegaron 8,775 dosis para inyectar al personal médico en el norte del país.
La Sedena detalló que los medicamentos permanecerán en las instalaciones de la empresa DHL en el Aeropuerto Internacional de Apodaca, Nuevo León, bajo seguridad militar. EL 28 de diciembre serán trasladados a las 05:00 horas vía terrestre a la ciudad de Saltillo, Coahuila.
El primer lote de este día llegó a la Ciudad de México, en donde la directora del Centro Nacional para la Salud de la Infancia y la Adolescencia (Censia), Miriam Veras Godoy, puntualizó que el arribo del antídoto se dará de manera “escalonada (…) Van a estar llegando muchas vacunas, muchas veces”.
Por su parte, Zoé Robledo, director general del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) dijo que al igual que el primer lote que llegó a México el 23 de diciembre, estas dosis serán utilizados para proteger al personal médico que trabaja en diversas áreas de hospitales COVID-19, entre los que destacan médicos, enfermeras, camilleros, laboratoristas y más.
Sin embargo, el proceso de vacunación se ha visto envuelto en polémicas. Tras el primer día en que se inyectaron las dosis, personal del Hospital General de México, ubicado en la capital del país, denunciaron que no fueron vacunados aun cuando los citaron para recibir el antígeno.
Así lo dieron a conocer testimonios de este hospital al diario La Jornada, al cual le mencionaron que la razón por la cual no pudieron ser inyectados fue que las vacunas se habían terminado.
No obstante, surgió una importante polémica al respecto, pues funcionarios de la Secretaría de Salud afirmaron que se repartieron 975 citatorios para igual número de dosis, lo cual concuerda con el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell, por lo que no había forma de que hubiese gente con cita y que terminara sin ser vacunada.
Una situación similar fue reportada por médicos y enfermeras del Hospital La Raza, también en la Ciudad de México, quienes protestaron bajo el argumento de que las vacunas no se aplicaron a profesionales de la salud, sino a directivos, lo cual fue rebatido por Zoé Robledo.
En conferencia de prensa, el director del IMSS confirmó la manifestación y descontento de los trabajadores, pero aclaró que únicamente se había vacunado a un directivo del hospital, el cual cumplía con los criterios establecidos por la Secretaría de Salud, respecto a la edad, comorbilidades y a que era alguien que atendía a pacientes de COVID-19.
También descartó la aplicación de la vacuna en personas fuera del sector salud y detalló que entre los 22 trabajadores seleccionados de ese nosocomio había médicos especialistas, generales, enfermeras, auxiliares, laboratoristas, inhaloterapeutas, radiólogos, técnicos de alimentos y trabajadores de ambulancias, entre otros.
Según las previsiones del gobierno mexicano, se espera que para el final de enero de 2021 hayan arribado 1,420,575 vacunas para cubrir a todo el personal de salud del país, mientras que para el diciembre de ese año ya se tendrían las 34,400,000 dosis acordadas con Pfizer y BioNTech.
FUENTE: https://www.infobae.com/