Tijuana, 28 de marzo de 2025.– La tranquilidad de la colonia Sánchez Taboada se rompió anoche con el estruendo de los disparos. Eran poco después de las 7:00 p.m. cuando José Antonio, de apenas 14 años, cayó al suelo herido de muerte, a solo una cuadra de su secundaria.
Vestía su uniforme escolar cuando fue atacado en la esquina de la calle Yonqueros y la Cerrada Virgo. Algunos testigos vieron un auto negro alejarse a toda velocidad, pero el miedo los hizo esconderse tras las puertas de sus casas.
Los paramédicos llegaron con rapidez, pero ya no había nada que hacer. Su padre, con el rostro desencajado, fue quien lo identificó en la escena.
La comunidad está en shock. “Era un buen niño, no se metía con nadie”, dicen vecinos y compañeros de escuela. Ahora, mientras la policía busca a los responsables, una familia llora la pérdida de su hijo y la colonia suma otro nombre a la larga lista de víctimas de la violencia.