Tijuana, 24 de marzo de 2025.– Por más de dos meses, los vecinos de Otay Universidad han lidiado con un derrame de aguas negras en la avenida Universidad, situación que atribuyen a la falta de mantenimiento en las tuberías por parte de la CESPT.
María Judith Flores Carrillo, una de las afectadas, señaló que ha realizado reportes constantes sin recibir una solución efectiva. “Cada 48 horas llamo a la CESPT. Vinieron y detectaron que mi tubería está rota, pero no han hecho nada más”, expresó.
Debido a la situación, Flores Carrillo ha tenido que contratar un camión cada 10 días para extraer las aguas residuales, lo que le representa un gasto de 2,000 pesos por servicio.
Luz María Huerta, otra residente, denunció que el mal olor se ha vuelto insoportable y que la acumulación de aguas negras representa un riesgo sanitario. “No podemos seguir así, esto es un foco de infección”, afirmó.
Alicia Peralta, quien ha vivido en la zona por 30 años, recordó que anteriormente enfrentó un problema similar en su sótano y que ahora la situación se ha agravado.
Ante la falta de respuesta de las autoridades, los vecinos convocaron a los medios de comunicación con la esperanza de que su denuncia genere una pronta solución.
