Por Erik Galván
Playas de Rosarito, 2 de noviembre de 2021.- El color naranja y el olor característico del incienso se hace presente en la mayoría de las tumbas del panteón municipal de Rosarito.
Desde muy temprano familiares acudieron a adornar las tumbas, muchos colocaron la tradicional flor de cempasúchil con veladoras y la comida que le gustaba a su difunto familiar, todos conviviendo en armonía mientras al fondo se puede escuchar música y serenatas.
Roberto tiene en el panteón a dos de sus hermanos, cada año acude a realizar una limpieza de la tumba y pasar el día con sus familiares contando historias de cómo eran sus hermanos en vida.
“Aquí tengo a dos hermanos, ya hemos venido pero no le hemos adornado así, uno de mis hermanos de fallecido ya tiene como 20 años y otro apenas 6 meses, la luz son las velas para guiar el camino y las flores son las de cada año, las de cempasúchil y recordarlos aquí”.
Piden una sola cosa, que las demás personas que acudan los siguientes días respeten las tumbas y adornos instalados, pues están hechos con mucha dedicación y sentimiento para sus difuntos que ahí descansan.