De la eliminación del Fortaseg
La estrategia de seguridad en Baja California, y especialmente en Ensenada, está lejos de brindar resultados positivos en materia de reducción de los delitos de alto impacto; ni la Guardia Estatal ni la Nacional están a la altura de las circunstancias según se ha demostrado.
Hablemos en datos duros. Durante los primeros ocho meses del 2020, es decir, del primero de enero al 31 de agosto del presente año, se registraron mil 950 asesinatos en Baja California según las cifras oficiales de la Fiscalía General del Estado (a estas alturas ya rebasamos los 2 mil).
De dicha cifra, 247 se registraron en el municipio de Ensenada (que aún abarca a San Quintín hasta 2024), lo cual representa un incremento del 61 por ciento en este índice delictivo en comparación con el año pasado, ya que durante los primeros ocho meses de 2019 la cantidad de asesinatos registrados en este municipio fue de 153.
A nivel estatal la cifra es parecida a la del año pasado, que cerró con 2 mil 886 asesinatos, incluyendo por lo menos 23 víctimas de feminicidio, según los datos oficiales (recordemos que muchos casos de feminicidio no son tipificados como tal, por errores burocráticos que terminan por afectar en la impartición de justicia).
Es insultante que las autoridades digan públicamente que los índices de incidencia delictiva han bajado, como adjudicándose una victoria, cuando lo que bajó en realidad es el número de denuncias, porque ya nadie confía en que se hará justicia, consideran que es una pérdida de tiempo cumplir con las formalidades de acudir a la Fiscalía.
Los asesinatos son datos duros que no se pueden maquillar del todo, porque si bien es cierto que cuando desaparecen el cuerpo de la víctima no se registra como homicidio o feminicidio, los cuerpos que quedan a la mitad de la calle, o son arrojados en sitios urbanos, son una realidad que no se puede esconder.
A la triste realidad que enfrenta el país en cuestión de inseguridad se le suma una “cereza presidencial”, y es que en la propuesta de Paquete Económico 2021, que es elaborada por el presidente de la República y entregada por medio de la Secretaría de Hacienda al Congreso de la Unión, se eliminó el Programa de Fortalecimiento para la Seguridad, conocido como Fortaseg.
Dicho programa era dotado de 4 mil millones de pesos anualmente, y era aprovechado por alrededor de 300 municipios con altos índices delictivos, sin embargo, este año se redujeron a cero pesos y cero centavos los recursos para el mismo.
Baja California obtenía poco más de 130 millones de pesos, cada año, de dicho fondo federal, y eran empleados para fortalecer a las corporaciones policiacas municipales, principalmente con la compra de equipamiento y capacitación de los uniformados.
En el caso específico de Ensenada se obtenían 20 millones de pesos que eran empleados en la compra de patrullas, chalecos antibalas, armas y capacitación, por mencionar algunos conceptos, cosa que ya no se podrá hacer según pinta el panorama para 2021.
Cabe señalar que se pretende ingresar 100 elementos nuevos a la corporación local, pero la reducción a ceros del Fortaseg complica la posibilidad de comprar más equipo para que salgan a patrullar los nuevos policías.
Hasta el momento no se sabe a qué serán destinados los 4 mil millones que se le quitan a las policías municipales del país, hay quienes especulan que serán invertidos en la Guardia Nacional y otros suponen que serán invertidos en programas de bienestar para ganar votos en las elecciones de 2021…y yo no sé cuál de las dos opciones está peor. *Joatam de Basabe es comunicólogo y periodista, con más de una década de trayectoria en los medios de comunicación (radio, periódico, televisión e Internet).
Actualmente es secretario de la Asociación de Periodistas de Ensenada y reportero de Televisa Californias.