Pertrechado en algún cuartel militar de Tijuana, el teniente-Coronel Julián Leyzaola Pérez espera ansioso que sus abogados desactiven la orden de aprehensión en su contra por el delito de tortura.
¡En un cuartel no lo hallará la INTERPOL!
Y aunque los asesores jurídicos del militar retirado le consiguieron un amparo para evitar su arresto, esos brillantes abogados solamente lo protegieron de las acciones del Juzgado Primero de lo penal, pero ignoraron el Tercero.
El juez federal que concedió el amparo únicamente ordena abstenerse al juzgado primero.
Sin embargo, la novedad es que el juzgado tercero también giró orden de aprehensión contra Julián Leyzaola y contra el capitán Gustavo Huerta Martínez, quien fungía como su subalterno hace una década.
Dicen las víctimas que ambos jefes policiacos torturaron a muchos elementos bajo el argumento que prestaban sus servicios al crimen organizado.
Por esos tiempos llevaron al policía José Luis Hernández Gálvez a los separos de la Comandancia de la calle 8 de Tijuana donde lo medio-mataron.
Primero a gritos lo acusaban de robar a unos asiáticos que asistieron a Tijuana a un evento deportivo, y después querían que se reconociera al servicio de un grupo delictivo.
La golpiza, los toques y la bolsa de plástico en la cabeza, llevaron a Hernández al hospital y después a denunciar a Leyzaola y a Huerta.
La mañana del pasado viernes policías estatales arrestaban a Gustavo Huerta a petición del Juzgado Tercero Penal y no del Primero como suponían los abogados.
Si bien los juristas le consiguieron un amparo a Leyzaola, también es cierto que “olvidaron” desactivar a otras autoridades.
A principios de semana trascendió que la Fiscalía General del Estado emitió una ficha roja para que la INTERPOL arrestara a Leyzaola en cualquier ciudad del mundo.
Quienes saben de esos menesteres estiman que difícilmente arrestarán a Julián Leyzaola, pues seguramente se resguarda en un cuartel militar en la localidad.
Por lo pronto, el PAN y el PRD andan que no los calienta ni el sol, pues su esperanza de recuperar el poder político de Tijuana está puesta en Leyzaola y así no podrá ser el candidato común del PAN y del PRD.
BOA
Vaya ruido que generó la mañana del martes el presidente Andrés Manuel López Obrador, quien dio a conocer el contenido de un documento aparentemente elaborado por la oposición.
En este documento, que leyó el portavoz presidencial Jesús Ramírez Cuevas, se indican una serie de estrategias para derrocar a MORENA y al presidente López Obrador.
Las focas aplaudidoras del presidente se dieron vuelo al referir el documento, aparentemente elaborado por un grupo que se denomina Bloque Opositor Ampliado (BOA).
Esa mañana, mientras los señalados se deslindaban, Jenaro Villamil salió a decir que ese documento era apócrifo, es decir el presidente avaló una Fake News.
Muchos analistas pasaron momentos de confusión pues algunos pensaron que era otra gran idea de AMLO para acusar a los conservadores.
Puede ser que el presidente utilizó esa estrategia para victimizarse, aunque no esperaba que su subalterno Villamil desestimara la veracidad del documento.
Lo único innegable es que AMLO hizo más ancha la banda de polarización entre los mexicanos.
Entiéndase polarización como la separación entre los mexicanos.
Positivo
Muy sano resultará para todos la solución al eterno problema de las descargas de aguas residuales a la playa.
Para información de la gente, el río Tijuana ha llevado aguas negras por años al océano pacífico.
Claro que en Estados Unidos no se cansan de pegar el grito en el cielo, pues ambos países comparten el mismo mar.
Difícilmente los gringos pueden poner una división en el océano.
Hace unos días el gobernador del estado de Baja California Jaime Bonilla Valdez anunció que este añejo problema quedará resuelto a finales de mes.
La contaminación del mar ha aumentado por la irresponsabilidad de las autoridades, aunque afortunadamente parece ser quedará resuelto.
Cicuta News.com Cicuta.com.mx Twitter :@Cicutabc Facebook: Cicuta YouTube: Jaime Cicuta columna